GALLETAS DE NATA

Las de hoy, son unas galletas deliciosas, de fácil elaboración y con ingredientes sencillos que dan como resultado unas galletas como las de antes, suaves y llenas de sabor, el acompañamiento ideal para tardes de café o el complemento perfecto en el desayuno para empezar el día llenos de energía. El único "pero" –si es que lo tienen- es que la masa tiene que reposar por lo menos tres horas en la nevera y si es mas tiempo no pasa nada, incluso se puede preparar el día de antes y cocer las galletas al día siguiente (yo preparo la masa a media mañana y las horneo por la tarde).

Estamos a un mes de Navidad y en esas fechas solemos hacer regalos a amigos y familiares, de ahí que estas galletas se puedan convertir en un detalle ideal, solo hay que poner un poco de imaginación a la hora de presentarlas: por ejemplo podemos ponerlas en una bolsa de celofán cerrada con un lazo y una etiqueta y así quedarán perfectas o, en una caja de lata o de cartón bonitas. Cuidando un poco estos detalles os aseguro que conseguiréis sorprender a mas de uno con este regalo.
Con la cantidad de ingredientes que os indico salen bastantes galletas, pero si queréis hacer menos cantidad para probar, basta con dividir todos los ingredientes por la mitad. Ahora bien, seguro que os parecerán pocas cuando las probéis.



Ingredientes

1/4 litro de nata
1/4 litro de aceite de oliva de sabor suave
1/4 kg. de azúcar
800 gr. de harina o un poquito más
1 sobre de levadura en polvo

Preparación 

Poner en un recipiente el aceite, la nata y el azúcar. Batir hasta conseguir una crema suave y mezclar la levadura con la harina e ir incorporando la la crema de nata y el aceite poco a poco mezclando bien, con suavidad, hasta conseguir que no se pegue a las manos. No hace falta amasar como si fuera masa de pan, solo ir mezclando hasta conseguir una masa homogénea. Una vez que tengamos la masa en su punto la ponemos en un recipiente tapado y la ponemos a reposar en la nevera como mínimo 3 o 4 horas. Pasado este tiempo sacamos la masa del frigorífico y empezamos a hacer las galletas. Las de la fotografía están hechas con forma de panecillo: la hice formando una bola del tamaño de una nuez la aplasté y la decoré con unos cortes que hice con un cuchillo, pero también se puede hacer con cortapastas de la forma que queramos. Para ello debemos estirar la masa con un rodillo dejándola de un centímetro de grosor aproximadamente y luego cortamos. Una vez formadas las galletas, las ponemos en la bandeja del horno dejando un poco de espacio entre ellas. Las cocemos durante 10 o 15 minutos con el horno precalentado (encenderlo al principio, cuando empecéis a formar las galletas), a temperatura 170 o 180 grados, hasta que estén bien doradas.